Hace cosa de un mes iba a trabajar y me quedé flipado con una valla publicitaria. En lugar de anunciar coches o rebajas, la valla anunciaba arte. Ni más ni menos que la nueva exposición del Prado sobre Tintoretto. Inmediatamente me quedé fascinado por la idea de combinar publicidad a gran escala y pintura del siglo XVI. ¿Puede un cuadro de hace cuatrocientos años ajustarse a los parámetros y el lenguaje de la publicidad actual? Dos días después me llevé la cámara y traté de hacer alguna foto. Descubrí que se podía establecer un diálogo entre la mujer del cuadro y la del anuncio de Bacardi. Era una de las muchas posibilidades, quizás la más divertida. No sé si esta fotografía consigue el efecto, pero aun así, el asunto del contraste entre los dos lenguajes da para un interesante debate. Para verla más grande hay que pinchar aquí.
07 marzo, 2007
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1 comentario:
El tema de las interrelaciones entre arte y medios de comunicaciónd e masas (publicidad, tele o incluso cine) siempre me ha parecido muy interesante.
No dejo de pensar que, en el fondo, aunque en los tiempos modernos el arte se haya rodeado de un aura elitista, hubo un tiempo en que éste estaba hecho precisamente para las masas. Eran las personas de a pie, y no las clases pudientes, los receptores de los relieves de las iglesias románicas y góticas o de los cuadros de mártires del Barroco.
Mirado así, quizá una valla publicitaria sea un soporte más adecuado para un cuadro de Tintoretto que las herméticas salas del Prado.
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