30 junio, 2007

Paisajes habitados. Orgullo gay.

Una de las más divertidas travesuras de Paisajes habitados ha sido incluir una fotografía del desfile del Orgullo Gay en la sección de fiestas populares. Desde nuestro punto de vista, la distancia entre las procesiones de Semana Santa y la gran juerga de este desfile no es tanta como podría parecer. Al fin y al cabo, las dos son manifestaciones populares donde la pasión y el entusiasmo pueden volvernos grotescos. La foto la hice en mitad de la Gran Vía. El desfile estaba a punto de pasar y yo busqué el centro de la calle para tener la mejor vista de la cabecera. De pronto, todo el mundo echó a correr hacia mí. Levanté la cámara y me puse a disparar como un loco, rezando para que no me tirasen al suelo. Y salió esta foto tan expresiva. He decidido colgarla hoy porque hace justo un año desde aquella tarde. Dentro de un rato el desfile animará otra vez el centro, y yo no me lo pienso perder.

2 comentarios:

Alis dijo...

Efectivamente, la confrontación de estas felices caras con las siniestras comitivas de la semana santa deja claro con quién hay que quedarse...

June Fernández dijo...

Curiosa comparación. Hay pasión en ambas pero en una mejor canalizada que en la otra, como dice Alis. Aunque a veces se tache de frívolo, el carácter lúdico de las reivindicaciones del colectivo lgtb me parece algo admirable y a imitar. A ver si el año que viene puedo ir a Chueca, me atrae un montón. Y la foto me encanta, como todas, porque transmite a la perfección toda esa euforia.