El jueves pasado, 4 de noviembre, el Ministerio de Cultura anunció que concedía el Premio Nacional de Artes Plásticas a Santiago Sierra. El viernes, sólo 24 horas más tarde, Santiago Sierra decía tururú. No lo quería. Ni quería el prestigio, ni quería los 30.000 pavos. Pero sobre todo no quería vender su arte a los poderosos. Más bien todo lo contrario: Santiago Sierra es un señor que se levanta todos los días con el sano propósito de tocarle las pelotas a todos esos políticos, banqueros, advenedizos culturales y demás indeseables que van de un lado a otro en coche oficial. En su página web hay un completo registro de los agravios que perpetra contra la autoridad. Pero si hay que escoger yo me quedo con una acción: cuando en 2003, Sierra cerró el pabellón de España de la Bienal de Venecia y dijo que allí sólo entraban los españoles. Ni medios de comunicación, ni políticos italianos, ni Dios: solo españoles con el DNI en regla. Y cuando los periodistas extranjeros protestaron, les dijo que él únicamente les estaba privando de visitar un lugar, no de pensar. Maravilloso. Ahora, aplicando una coherencia absoluta, Santiago Sierra ha pegado una patada en el culo del sistema que intentaba fagocitarlo. En la carta que ha escrito a la ministra González Sinde dice: "El estado no somos todos. El estado son ustedes y sus amigos. Por lo tanto, no me cuenten entre ellos, pues yo soy un artista serio". Al lado de esta demostración de integridad es inevitable pensar que todos los demás somos unos conformistas. O lo que es lo mismo: que no somos nadie. ¡Bravo, Santiago!
09 noviembre, 2010
No somos nadie (XVII). Los cojones bien puestos de Santiago Sierra.
Publicado por Rfa. a las 19:38
Etiquetas: Arte, No somos nadie
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
5 comentarios:
Ole sus huevos!!
Joder, Rafa, este tipo es un titán y que Dios te guarde por darme a conocer tremenda demostración de huevacos.
Sí, los demás somos piltrafas humanas.
¡¡30.000 euros!! Holy shit...
Bueno, eso está muy bien, pero a ver si ahora se va a poner de moda rechazar premios... ¿No fue un torero el anterior?
Fue el polémico Dexter español...
Hombre, habría molado más aceptar el premio, coger la pasta y poner a parir a todos después con la cartera llena. Al más puro estilo Homer: -No necesito tu sucio dinero"
Ron Howard: -Normalmente cuando se dice eso no se coge el dinero. Etc.
Yo no sé por que no hacen todos los artistas esto de rechazar premios, da caché, es como tener a la Iglesia en contra :)
Publicar un comentario